Con esta serie limitada
de 6 números Sean Murphy ha conseguido lo que pocos creadores del noveno arte
han podido conseguir, un clásico instantáneo.
La historia a grandes
rasgos es la siguiente: Una cadena decide hacer el reality show definitivo,
crear un clon de Jesucristo a partir del ADN del Sudario de Turín; y para más
inri el niño nacerá de una virgen adolescente en directo. Desde su nacimiento
el pequeño Chris se convertirá en una estrella mediática, ya que toda su vida
es grabada y retransmitida a todo el mundo. Pero al llegar a la adolescencia y
descubrir la verdad sobre su creación huirá del programa y atacará al sistema
establecido con el afilado sonido del punk rock.
Este comic es como un
tsunami que te atrapa desde el principio y no puedes dejar de leer hasta el
final. Murphy mezcla magistralmente escenas de acción desbocadas que harían
tener sueños húmedos a cualquier director de Hollywood, momentos de enorme
dramatismo, y una crítica feroz a la idiotizada sociedad del siglo XXI; todo
esto con un toque tarantiniano al inundar su obra de referencias: El show de
Truman, Akira, Punisher, y por supuesto el punk rock de grupos como Stiff
Little Fingers, The Clash, o Sex Pistols.
Sean Murphy como
dibujante es cojonudo, todo un maestro del lápiz y las tintas como pudimos
comprobar en Joe el Bárbaro, Hellblazer, o American Vampire. Lo que al menos yo no sabía es que fuese también
un guionista tan bueno, ya que aún no he leído su opera prima, la novela
gráfica Off Road. Sin duda éste es el
mejor comic de Vertigo del año, y posiblemente de los últimos años.
Autores: Sean Murphy
Rústica
Editorial: ECC ediciones
224 páginas
Precio: 16,95€
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