Continúa la space-opera imaginada por el dúo de autores formado por Brian K. Vaughan y Fiona Staples en este cuarto capítulo, donde seremos testigos, tras una elipsis temporal, de la infancia de Hazel, una revoltosa y regordeta niña por la que beberán los vientos sus estresados padres, luchando para vivir una vida lo más normal posible sin ser descubiertos por los indeseables que quieren acabar con la prueba del amor entre dos especies eternamente enfrentadas.
Una epopeya repleta de amor, luchas de poder, intolerancia, y pequeños momentos que marcan el devenir de una vida. El buque insignia de Image, en cuanto a premios se refiere, sigue su andadura hacía el Olimpo de las grandes colecciones de cómics de todos los tiempos. Cierto es que Vaughan no cambia la estructura que le ha dado tantos buenos frutos, pero no importa, el simple hecho del ejemplar desarrollo de los acontecimientos a través de la evolución de los personajes, consigue suscitar en los lectores un impulso devorador inexorable al igual que hacían aquellas antiguas noveluchas de kiosko.
Y si a eso le añadimos los plásticos y coloridos dibujos de Staples que crean en nosotros una adicción intratable, nos encontramos ante una de las obras más completas de los últimos años. Que dirán lo que quieran sobre el arte de Staples, pero es única en la representación de expresiones faciales, y dibuja unas bellísimas mujeres.
Extrañas civilizaciones extraterrestres, especies de todo tipo practicando sexo sucio, y fieros guerreros en busca de fortuna. Un crisol de oportunidades que Vaughan sabe llevarles a buen puerto.
Una joya de nuestro tiempo.
Así que sin más amantes de los cómics, si os gustaron los anteriores capítulos haceros con este sin la más mínima de las odiseáicas dudas.
Autores: Brian K. Vaughan y Fiona Staples
Editorial: Image/Planeta deAgostini
Cartoné
Páginas: 152
Precio: 16,95 €
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